"El Jardín de mamá pulpo"

martes, 21 de mayo de 2013

Soy una mala madre...




Apenas leía sobre algunas de las enfermedades a las que todos los peques están expuestos, y aun más si los llevamos a una guardería y empiezan a ir a cole. Se nos hace tripa el estomago de pensar que pueden contagiarse de todo y los nervios se encrespan cuando sabes que algún niño se ha ausentado por varicela o una fuerte enfermedad contagiosa.

Por suerte, las niñas han resistido y aun no se han contagiado de varisela, ni sarampión que es lo que lleva más días de recuperación tras un contagio. Lo más que han sufrido ha sido respecto a la gripa.

Cuando eran más pequeñas mis padres me ayudaban a cuidarlas, pero ya con la peque que ha salido una verdadera diablilla, mis padres ya no aguantaron el ajetreo que implicaban dos, que digo dos, si la peque contaba como si fueran cuatro. Es un terremoto andando, y mis padres ya mayores, era mucho trabajo y esfuerzo para ellos cuidarlas.

A través de mi pequeña diablilla ha sido que me he dejado ser una mala madre. Antes, con la primer princesa la cuidaba de todo, la abrigaba bien, en las noches me paraba para ver si estaba bien abrigadita, que no tomara cosas frías  no sacarla al aire, bueno me preocupaba de todo; no cojas esto que esta sucio, no te tires al piso que esta frió, en fin era un madre dedicada.

Mi pequeña terremoto, me enseño que había que dejarla descalza; porque los zapatos y las sandalias no le gustan,  que jugar con la tierra no es tan malo, y que tocar y experimentar nuevas texturas y sensaciones es una forma de aprender,  que tirarse al piso es relajante; esta fresco, agradable y que así aprende a poder dormir donde quiera, que no era necesario peinarla con chongos todos los días que ella es feliz deschongada. (la coletas no le duran ni 15 min), y que ensuciarse un poquito la ropa no cuesta más que echarla luego a la lavadora.

Claro que se ha enfermado, pero no tanto como yo pensaba. Todas esas cosas que ella  ha ido haciendo me han ver que no son tan malas. He  observado que le encanta ir descalza donde quiera. Y leyendo me encontré con un articulo donde dice que es bueno dejarlos descalzos porque les ayuda a sus pies.  Alguna que otra ves le vi con moquitos pero nada grave y no hice mucho caso, simplemente el pañuelo, limpiarle y listo. . De andar por el piso, porque le encanta tirarse al piso, y hacer como angelito,  lo único malo es la lavada de la ropa, la deja peor que los futbolistas; lo bueno es que existen las lavadoras y la regadera con agua calientita para meterla a bañar. Y de la tierra, un día las encontré casi bañándose en ella, desde la cabeza a los pies. Sin embargo no se enfermo por ello.

Se ha enfermado del estomago,  porque todo lo que encuentra a su paso lo prueba, ( ay que asco), muchas veces, ya no se ni cuantas de ellas,  me quedaba perpleja con cara de fuchi y diciendo, "¡no!que te estas comiendo!". Bueno eso le ha enseñado que no todo se debe llevar a la boca. Y ni que decir de los sustos que me he dado con eso. Ha probado el aceite para limpiar los muebles de madera, las pastas de dientes, las cremas del cuerpo, el jabón,   los plumones y las crayolas. (ya me tiene varias partes de la casa pintadas con crayola, pluma y plumón, apenas encontré la colcha de cuarto pintada de pluma, y hace poco el mueble de cuarto que es blanco,  pintado en color morado, junto con el piso debajo de la cama).  Pero ya no me preocupo tanto, con todas nuestras experiencias aprendiendo, yo como madre (ya sabes a tener kilos y kilos de paciencia  y   ella como exploradora,   hemos aprendido a no ser tan exigentes, me ha enseñado un poquito a ser mala madre.

Con la princesa mayor no pase tanto como con la peque, ella ha sido más bien dedicada, organizada, limpia, hacendosa, jamas me pinto una pared, ni algún mueble, nunca se quito los zapatos, bueno para que contarles más simplemente diferente, con ella he aprendido otras cosas, como dejarles ayudar a mamá en cosas del hogar, a muy temprana edad me quería ayudar con la limpieza, nos ha hecho las cenas la mayoría de las veces, y tantas cosas que a su temprana edad yo no hubiese imaginado ponerle a hacer, todos los hijos son tan diferentes y aprende uno tanto de ellos.

Ahora cuando se han enfermado ya no voy corriendo al pediatra,  ni a la farmacia, me he tomado la libertad de utilizar los remedios de la abuela, unas cuantas dosis de remedios caseros que alguno servirá. Porque eso si, era más mala madre pasando por alto los horarios exactos para dar el medicamento a sus horas y ni se componían  y me preocupaba más, y aparte de que el medicamento a veces les hace más daño a sus estomagitos y después el cuerpo se acostumbra y termina por no hacer nada.



Me han funcionado más los remedios caseros, por cierto un consejito, la miel es buenísima para muchas cosas, eso y la vaselina uf, nunca faltan en el botiquín. (des pues les hago un post con los múltiples beneficios de la miel y la vaselina y de los remedios que he utilizado).  Y bueno, junto con los remedios caseros, también me han funcionado el darles vitaminas y los polvos de leche fortificados específicos para niños, y pues con esto me ha ido bastante bien, ya tengo tiempo que no se han enfermado

Así que mejor decidí relajarme, y dejarles que anden descalzas,  que de ves en cuando jueguen con la tierra, que anden sin suéter, que se mojen, que coman paletas de hielo, helados, que jueguen con la tierra, en fin solo hay que tener mucha paciencia, y respirar profundo. Tal ves piensen que soy una madre totalmente desobligada y como he podido ser así  pero no me importa lo que digan las personas, se enferman mucho menos que otros niños que andan bien cuidaditos, y lo más importante y principal; disfrutan la vida, las cosas, los momentos y son FELICES. 


Mis campeonas, las que me han sacado canas,  me han hecho feliz , con las que tengo que sacar los kilos de paciencia y  me dan ganas de vivir y ser feliz. Las amo!!!




Y tú que opinas de esto? ¿crees que he sido mala madre', ¿tu te consideras mala madre o conoces a alguien que ha optado por ser como yo?  No olvides dejar tu comentario o tú opinión, me gustaría saber que piensas.